Me considero un estudioso del mundo interior, y mis obras van en este sentido. Me gusta describir a la perfección los sentimientos de todos mis personajes, porque es ahí donde el lector o lectora se puede ver más identificado. Desde que tengo uso de razón, me ha fascinado la lectura, me pregunto, ¿cuántos personajes habrán pasado por mi imaginación a día de hoy? Pero he querido dar un giro y ver la perspectiva desde el otro lado, dejar de ser lector para convertirme en autor.